tiqun

Miércoles 20 de septiembre, 20:00h

Lanómina, C/ Pasaje Mallol 16, Sevilla

Presentación de dos libros de la Editorial Brumaria

La revista francesa Tiqqun "ha influenciado círculos filosóficos y políticos radicales, grupos situacionistas o posituationistas, en la ultraizquierda, los movimientos okupa y autonomistas, así como una parte de anarquistas." (Wikipedia dixit), órgano consciente del autodenominado "Partido Imaginario"

 

Tiqqun y la cuestión del Bloomtiqqun

¿Quién es Tiqqun? ¿Y el Comité Invisible? ¿Y el Bloom? ¿De dónde vienen? ¿Qué significan? ¿Qué plantean? ¿Cómo pensar-hacer en el presente con ellos? ¿Por qué tratar cuestiones como el biopoder, la guerra civil, la cibernética, los dispositivos de control o la sociedad del espectáculo? ¿Para qué la insurrección, la comuna, la invisibilidad y el nihilismo?

Aun a pesar del peligro posmoderno de acercarnos a estas cuestiones, su fuerza es innegable y está ahí para recordarnos que no tenemos derecho a la esperanza ni somos dignos de vivir esta vida. Por ello –y frente a ello– este libro, una llamada a pararse a pensar cuál es el orden actual de las cosas, cómo estamos en él y con qué contamos para enfrentar al mismo. Podemos llorar, lamentarnos e idealizar con otras realidades. Pero el monstruo está ahí y tenemos que seguir pensándolo para destruirlo y construirnos.


La política no es un plátanoplatano

Aunque sus autores son unos viejulis occidentales en la comodidad, PNP está ahí para recordarnos que la escoria de esta derrota sin final sigue ahí, jodiéndonos constantemente. Y todos nosotros somos culpables de ello, los que luchan en esta guerra en curso y los que no, quienes han sido alienados por el capital y quienes han sido alienados por los enemigos de éste, los sacerdotes y sus feligreses, comunistas, anarquistas, hippies, socialistas, capitalistas, Blooms? todos.

¿Que esta vida es una puta caca? Sí, pero también tiene sus cosas buenas, ¿no? Pues eso, menos llorar y más reír. Ahora bien, sin olvidar que hay que armarse para batallar.
Muchos tabúes continúan entre nosotros como si nada. Ya es hora de que los afrontemos de una vez por todas. Quizás así PODEMOS limpiar toda la mierda que nos rodea, que no es poca.